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3 Comments

  1. Libérrimo
    26 mayo, 2009
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    Miles de años después los que se autoconceden el rol de intermediar entre los dioses y los hombres siguen las mismas prácticas: curiosa analogía la que existe entre la aversión de los hechiceros hacia los herreros en varias culturas africanas y la que los sacerdotes occidentales sienten contra el avance científico-técnico.

  2. Silvestre
    26 mayo, 2009
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    Las obsesiones morales de la Iglesia poco tienen que ver con los evangelios ni con la Biblia. Escritas están tantos comportamientos, acciones y omisiones de patriarcas y profetas que hoy consideran grandes pecados. Claro que eso de tener doctores sirve para liar la guita, y concluir que los textos no dicen lo que parece sino todo lo contrario. Es la teología, que quieren llamar ciencia.
    Pero la Iglesia no ventila del mismo modo todas sus obsesiones morales y mandamientos derivados. Sabemos que practicar sexo sin propósito reproductivo es para ella pecado mortal, aunque se trate de prácticas solitarias (pecado nefando con la sodomía o cualquier otro “desperdicio” de semen). Sin embargo da por perdida esta batalla y no se esfuerza en cargar de culpas a tanto pecadores. Vamos, que no le resultaría rentable emprender una campaña contra el sexo por puro placer.
    Fijaros que tampoco saca toda su artillería contra lo que hace Antiñolo y otros científicos. La gente no lo comprendería, y por eso se centra en el aborto o el matrimonio homosexual, por que sabe que son temas escabrosos que remueven conciencias y sentimientos cavernarios.

  3. 27 mayo, 2009
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    La Iglesia antiguamente basaba toda su autoridad en los milagros: hechos sin consistencia científica, de los que siempre dudé.Las curaciones en Lourdes se producen por sugestión, puesto que en las enfermedades existe un importante factor psicológico y una persona puede curarse si tiene ganas de vivir o si cree que algún poder divino la está ayudando; otras veces se dan casualidades que la gente toma como efecto divino, basándose en un pensamiento supersticioso. A medida que desaparece la ignorancia humana la técnica avanza y ya no hace falta necesitar un dios creador, el miedo a un más allá ha desaparecido para muchas personas. Y ahora continuando la línea de Silvestre, voy a referirme al hecho de que la Iglesia siempre ha hecho hincapié en el tema del sexo, porque no le convenía que los sacerdotes se casaran: en cuanto hubiese mujeres por medio se formarían familias, que acabarían con el patrimonio eclesiástico(en el Vaticano todo era diferente) Para enmascarar esta idea se tomaba como ejemplo un pasaje del Antiguo Testamento, La Expulsión del Paraíso: Eva había sido la primera pecadora del mundo y Adán el inocente que mordió la manzana. La mujer fue apartada de la educación, no debía saber demasiado, había que alejarla de los cargos eclesiásticos , sólo se contaba con las beatas porque no eran peligrosas para el patrimonio, todo lo contrario, muchas veces al morir lo incrementaban.
    Precisamente el celibato de los eclesiásticos a algunos les ha hecho vivir en contra de su propia naturaleza(en estos días la Iglesia Irlandesa ha pedido perdón por los atropellos cometidos, hecho sucedido también en Norteamérica) Almodóvar refleja estos problemas de los clérigos en su película sobre la educación religiosa.

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