Para complementar la entrada anterior de AM, comento el caso del Mall de la calle 16 en Denver (Colorado): una opción más barata que el tranvía para una distancia similar en una vía comercial y peatonal.
La principal calle comercial del centro de Denver es peatonal. Los únicos vehículos que recorren la vía son autobuses ecológicos que circulan de una punta a otra con paradas muy próximas y a una alta frecuencia de paso. Son gratuitos y constituyen uno de los elementos que han hecho de esta calle el principal punto de ocio de la ciudad, ya que los ciudadanos pueden decidir ir andando o moverse con rapidez en autobús hasta los extremos de la avenida, donde se conecta con el resto de la red de transporte público. Su sistema de tracción (híbrido electricidad/gas) hace que sean muy poco contaminantes y bastante silenciosos, y el riesgo de atropello es mínimo, ya que circulan en un pasillo central a un nivel ligeramente inferior al de los peatones.
Son autobuses que circulan con gas licuado, emiten gases como todos los motores de explosión, no son tan ecológicos como los pintan.
Tampoco el tranvía lo es, porque al final la electricidad que consume viene fundamentalmente de centrales térmicas (o nucleares).